Relación médico-política sobre la aparición de la fiebre amarilla, á últimos de julio y principios de agosto de 1821, en las tripulaciones de los buques del puerto de Barcelona, y sus progresos en la barceloneta é introducción en la ciudad / escrita por Juan Francisco Bahí.

Bahí y Fonseca, Juan Francisco, 1775-1841.

Date:: 1821

Credit: Relación médico-política sobre la aparición de la fiebre amarilla, á últimos de julio y principios de agosto de 1821, en las tripulaciones de los buques del puerto de Barcelona, y sus progresos en la barceloneta é introducción en la ciudad / escrita por Juan Francisco Bahí. Source: Wellcome Collection.

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$rado en aquella Isla poco antes los negros conducidos de «a * osta de Africa. / t *5 Nadie pensó entonces que entre los ricos fardos y í'-^ws de nuestras Américas , ó entre las n)aderas conducto'^s, estu- viese escondida la hidra , que dentro de poco nabia de cambiar aquel puerto de delician en un sendero de contagio mortífero , y que diseminado ó reproducido llev-'Se tras de si la desolación y la muerte de aquellos misn^c ciudadanos que fueron alegres allá , y que pisando eJ veneno pestilencial se creían en un funto seguro. Los dias 24,25 de julio y sus «imediatos fueron los se- ñalados con 2a subida de la temp-'ratura, según marcó el termómetro , para desenvolver el ^érmen del mal. A fines de dicho mes y prlnc/pio de agosto empezó i difun- dirse alguna voz por la ciudad , de que en el hospital general civil habla algún enfermo procedente de los buques del puerto con enfermedad muy maligna. Se dijo que la tripulación de una polacra napolitana , surta hacia tiempo y venida de Na'- poles , habia dado aUos atacados de un úpkus , que algunos sospecharon podrid ser el petechialis que se desplegó en Italia en estos últim*** ^fíos , y que también apareció en esta ciudad en el de '^^^9' No obstante se añadieron luego noticias de que en la bar- celr^eta habia también algún enfermo muy grave, procedente de \)s buques venidos de América. Se inspeccionaron con escru- pulosidad los enfermos, y algún cadáver de esta proceden- cia , y se divulgó la voz de que se habia manifestado la fie- bre amarilla en el puerto. El Gobierno muy luego y con la mayor eficacia trató de indagar la realidad de estos asertos, y sobre los dias 6 y 7 del propio mes se tomaron enérgicas providencias para atajar iin mal , que amenazaba devastar las tripulaciones de los buques, el vecindario de la barceloneta inmediato á ellos , y por fin contagiar la hermosa Barcelona , que hasta ahora se habia li^ bertado de semejante plaga. Se habilitó luego el lazareto sucio, estramuros de la ciudad, para recibir los enfermos sospechosos de los buques. Se ofreció generosamente para el servicio de este establecimiento el sq*$